Hubiera o hubiese saltado la albarrada

El otro día fui con un amigo de Francia (Antoine) y otro de Ecuador (Benicio) a uno de los 3 gimansios que hay en el campus, yo fui a hacer un poco de ejercicio cardiovascular. El gimnasio es nuevo y es sorprendente: tiene dos pisos y grandes ventanales que miran hacía el campus, así que mientras uno corre en las bandas o hace bicicleta puede ver el paisaje. Sobre las instalaciones basta decir que tiene una pista de tartàn adentro para quienes no quieren usar las bandas estacionarias y prefieren desplazarse cuando corren. La pista rodea los aparátos. Cuando uno ha terminado su ejercicio, puede dejar su ropa en unos lockers, ducharse y un pasillo embaldosado lo conduce hacía un area donde hay un jacuzzi para varias personas donde uno puede reposar los músculos y una piscina para jugar water polo o relajarse con un tobogan. Lo mejor es meterse al jacuzzi y luego a la piscina y viceversa para sentir el cambio de temperatura. Al final regresa uno a los vestidores, se vuelve a duchar y hay una maquina (una centrifuga) para secar tu traje de baño y que tu mochila no se moje. Por cierto, la báscula es digital y la última vez que me pese registro 83 Kgs. Ya veremos como evoluciona eso.